Es probable que esta entrega resulte un poco complicada si esta es la primera toma de contacto con el asunto. Pero vale la pena, os puedo garantizar que si entendéis esto habréis dado un gran paso adelante para dominar la técnica fotográfica y que, a partir de aquí, vuestra velocidad de aprendizaje se multiplicará.
Ahora que ya conocemos qué son tanto el obturador como el diafragma es el momento de ponerlos totalmente a nuestro servicio para lograr las fotografías que queremos. Disparar usando los modos manuales es la manera que nos dará libertad plena a la hora de hacer fotos y conseguir lo que queramos.
Todas las cámaras réflex y la mayoría de las compactas medias y avanzadas poseen modos de disparo manual. Suelen ser los siguientes:
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- S (en algunas cámaras aparece como Tv): Shutter Priority o prioridad de la velocidad. La cámara calcula la apertura necesaria para poder lograr una exposición correcta partiendo de una velocidad elegida por el usuario. Darle prioridad a la velocidad permite interpretar el movimiento en nuestras exposiciones.
- M: Manual. Todo es controlado por el usuario.
Cuando se trata de disparar en modo totalmente manual, M, el fotómetro o exposímetro que todas las cámaras traen se vuelve una herramienta indispensable para calcular la exposición correcta. Poco a poco, con la práctica, irás desarrollando la capacidad de averiguar los parámetros adecuados para cada situación. Aunque siempre contarás con el apoyo del exposímetro para comprobar si tu intuición te está llevando por el camino correcto.
FUNCIONAMIENTO DEL EXPOSÍMETRO
Este sencillo mecanismo nos indicará si con los parámetros elegidos la exposición será correcta, si la foto resultará sobreexpuesta o si por el contrario estará oscura y como resultado obtendremos una imagen subexpuesta. Además nos informa de en qué medida esta sobre o subexpuesta.
Lo que trataremos de lograr en condiciones normales siempre va a ser una exposición correcta. Por tanto, que el indicador se encuentre situado bajo el 0.
¿CÓMO INTERACTUAN EL DIAFRAGMA Y EL OBTURADOR?
Sabemos que una foto bien expuesta se logra si la cantidad de luz que llega al sensor de nuestra cámara es la adecuada. Que esto sea así depende de cómo configuremos la abertura del diafragma y el tiempo de exposición. Variar cualquiera de estos dos parámetros incide directamente en la cantidad de luz que va a entrar en nuestra cámara y, por tanto, en el resultado de nuestra foto.
Ya hemos hablado del obturador y del diafragma. Para estudiar la interactuación entre ambos parámetros, partamos de las escalas clásicas de abertura de diafragma y velocidades de obturación.
- Velocidades de obturación clásicas: 2” – 1” – 2 – 4 – 8 – 15 – 30 – 60 – 125 – 250 – 500 – 1000 – 2000
- Aberturas de diafragma clásicas: 1 – 1.4 -2 – 2.8 – 4 – 5.6 – 8 – 11 – 16 -22
En las cámaras digitales actuales, puedes encontrar pasos intermedios tanto de diafragmas como de velocidades de obturación. Esto no es malo, al contrario, es bueno, pues te permitirá ajustar mejor la exposición a las condiciones lumínicas. Pero aprendamos cómo interactúan usando sus valores clásicos.
Debemos asumir, como norma, que cada paso de diafragma clásico que subimos implica que en nuestra cámara entrará la mitad de la luz que entraba en el paso anterior. Por el contrario, cuando bajamos un paso, la cantidad de luz que entra se duplica.
Lo mismo ocurre con las velocidades de obturación, cuando subimos una, la cantidad de luz que entrará en nuestra cámara será la mitad. Por el contrario, cuando bajamos un paso, la cantidad de luz que va a entrar será el doble.
Sabiendo esto es lógico deducir que no existe la combinación perfecta de velocidad de obturación y abertura de diafragma, pues hay muchas que son equivalentes. Elegir una de ellas dependerá siempre del efecto que queramos lograr en nuestra foto.
Como vemos en este ejemplo, al ir cerrando paulatinamente el diafragma se van prolongando los tiempos de exposición, de esa forma contrarrestamos la luz que está dejando de entrar al cerrar el diafragma. Pese al cambio de parámetros, la exposición es idéntica en las tres fotos, pero si pulsas sobre la imagen para verla en grande observarás que cada vez hay más profundidad de campo. ¿Recuerdas la relación que hay entre la profundidad de campo y la abertura del diafragma?
NECESITO MÁS LUZ ¿ABRO EL DIAFRAGMA O HAGO UNA EXPOSICIÓN MÁS LARGA
Partiendo de unos parámetros determinados podemos hacer que llegue más luz a nuestro sensor o bien abriendo el diafragma o haciendo exposiciones más largas. Recuerda que ninguna combinación es perfecta, será buena siempre que el exposímetro nos diga que así es.
Todo depende de las condiciones de luz y, sobre todo, de qué queramos lograr. Mañana veremos algunos casos prácticos.
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